miércoles, 4 de febrero de 2009

MI AMIGO MAYORCETE


Mi amigo mayorcete esta mañana estuvo bastante activo. Como casi siempre. Cuando nos vimos para tomar el café después de comer, en el bar de la esquina, va y me cuenta lo que sigue.

-“Llegué en el bus después de estar en Hacienda resolviendo una papeleta de una multa a un vecino que así me lo pidió. Pero antes de esto estuve en una entidad bancaria con otra persona pidiendo una ayuda para una asociación cultural que desean hacer una revista. Y después fui a rezar a una iglesia, cosa que ya sabes que realizo con cierta frecuencia. Y entre estas cosas me acerqué algo de tiempo de la mañana para ir al gimnasio durante unos cuarenta minutos…”

- “Y hete aquí, que cuando bajo del bus, debo saltar un buen trozo pues el bus no puede orillar en la acera. ¿Por qué motivo? Había un coche aparcado con el conductor dentro, que estaba con el teléfono o el MP3 escuchando algo o a alguien. Le pedí –con toda educación- al que estaba dentro del coche que bajara el vidrio de la ventanilla y una vez bajada le advertí al chófer joven –no llegaría a los treinta años- que aquel no era el lugar idóneo para estar aparcado ya que está señalizado “Parada bus”…¡Y tuve que dar el salto que por poco me estrello contra el suelo!...”

¡Cómo le sentó al joven chófer las palabras de mi amigo mayorcete!

- “¡Váyase a otro sitio para hacer de policía y así usará su tiempo libre en algo! ¡Mire me voy a ir porque no tengo ganas de discutir ahora. Para usted la razón”.

Y mi amigo mayorcete siguió su camino para su casa, con la cabeza llena de confusión. “¿Debería ser la lluvia que pone a la gente de los nervios o es la dichosa crisis económica que afecta a la relación generacional?”
)

No hay comentarios: